Żubrówka

a Kasia Kadziolka

El invierno está crudo en tu ciudad
y esperás viendo la nieve caer por la ventana del bar
donde trabajás...
el olor del falafel te pone cómoda,
pero el gris de los cielos del norte
y sus mares remotos
te dan,
a veces,
ganas de llorar...
ahí estoy YO,
llevándote de la mano a alguna taberna
para calentar tus pies con vodka,
para ke te rías y me cuentes lo feo ke es estar ahí,
todo el año,
esperando nada,
viendo los días pasar
pero en una ciudad hermosa,
o ke suele ser hermosa
pero ke por los inviernos se apaga
y da dolor de huesos
y angustia,
porke no tiene límites terrenales
y todo puede ser oscuro...
no hay mucho por hacer
y las bicis se patinan por el piso lleno de hielo,
y con miedo a caerte en un canal congelado,
vas por las calles esperando llegar a tu casa,
porke anochece a las 5
y las noches son largas!
más largas ke en tu país lleno de flores...
las luces de Spuistraat te dan ganas de volver,
pero vos sos una de Esas personas,
y eso está buenísimo!
cuando los grandes cielos vuelvan a acobijarme
una siesta de 14 horas escuchando ambient,
tomando whisky "gratis",
y mis emociones
(ke no son más ke flujos de aire en el pecho y la garganta)
hagan un festival de caos
por todo mi cuerpo y me recuerden cosas hermosas,
ya me contarás ke la vida,
más allá de todos esos grises
y esos inviernos,
es bastante hermosa.